Día poco propicio para visitas externas por la intensísima niebla pero que sin duda permitió el lucimiento de los templos visitados con todo su esplendor. Empezamos por la plaza de Cervantes y los edificios más emblemáticos que conformaron el entorno urbanístico surgido a finales del siglo XIX cuando la vieja iglesia de San Andrés se caía y el Ayuntamiento les cedió el convento de Madre de Dios abandonado tras la desamortización. Traslado que pagó el Ayuntamiento y que fue realizado por los presos de la cárcel provincial. Este lugar es hoy uno de los más atractivos y plenos de sabor del Badajoz antiguo.
Rápidamente fuimos a ver la bonita capilla del convento de las Carmelitas Descalzas (reforma de Santa Teresa) que con el respaldo económico del Obispo Amador Merino Malaguilla en el s. XVIII dotó a la pequeña capilla de una gran riqueza ornamental, la que debió de ejecutarse muy a su gusto, pues destacan elementos muy relacionados con su vida.
Después pasamos a la actual iglesia de San Andrés (parroquia de la Purísima Concepción y San Andrés Apóstol) donde su antiguo párroco D. Rafael Cubillo Rodríguez nos abrió de par en par la iglesia y durante cerca de dos horas nos mostró todos sus rincones y la historia de cada “imágenes del pueblo”; San Roque, del Pilar, la Anunciación, Santa Lucia, la Virgen del Rosario y su homónima de Telena, San Ramón Nonato, el Descendimiento, la Piedad y la Esperanza, San Judas, etc. Además visitamos la sencilla pero notable exposición de cuadros y material orfebre. En fin una larga pero interesante visita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario